– Qué te pasa, hombre, que te veo muy preocupado?
– Nada, tío, que mi negocio no funciona.
– ¿Pusiste letreros?
– Los más caros.
– ¿Pusiste ofertas?
– Imposibles de igualar.
– ¿Propaganda?
– También.
– Entonces, ¿qué puede fallar?, vamos a ver… Déjame echar un viscazo… Letreros, propaganda, ofertas… ¡Serás idiota! Que no es con CE, ¡sastrería se escribe con ESE!